Trabas y libertades- Escribe Lorena_edo. tensei

 

Lista de estupefacientes consumidos al momento de escribir este texto falopa:

antes : coca -cola.

Durante : más coca -cola, cigarrillos armados con tabaco de muy baja calidad, pero con supuesto con papel orgánico de quema lenta

Despues: mate.



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No suelo acordarme de las cosas que sueño cuando sueño, y no es cosa que me genere molestia. Al contrario, al no tener conciencia de estar soñando, no es algo que me preocupe.

Pero a veces si; me despierto con un pie adentro de un sueño y con el otro pie colgando de la cama. Es un momento delicioso, en el que no distingo si estoy acá, allá, o en ningún lado. Es el teatral despliegue de la matrix cerebral alrededor de mi habitación.

Visto desde un costado más etérico, seguro que se ven ahí los hilos de la trama onírica retrocediendo de a poco, hasta fundirse en un punto negro, chiquito y desaparece. Y es ahí cuando empiezo a despertarme.

Entonces arrancan esos segundos posteriores de confusión total en el que parece que no hay tiempo. Me apuro para hacer una revisión muy rápida, para no olvidarme de nada de lo que acabo de soñar , porque las veces que me doy cuenta que estuve soñando, quiero acordarme de todo.

Ahí; medio enredada entre los velos de mi sueño terminado, y mi cuerpo entero que reposa como un bichito diminuto en su capullo de seda, empiezo a recordar .

Siempre de atrás hacia adelante. Primero me acuerdo de lo último y mientras voy recordando, de verdad, no se nunca como es que empieza el sueño sino hasta que llego ahí.

Arranca la lluvia de imágenes, y después de las imágenes, las sensaciones. Viajo mucho cuando sueño, parece. Estoy en quien sabe donde, pero muy lindo lugar. Y no hago la gran cosa . Voy caminando . Ni cuando sueño tengo auto.

Y siempre son los sueños iguales: voy sola, entre paisajes surrealistas. Y siento el viento suave, ni muy cálido, ni muy frío: es un vientito exacto. Ese que te hace levantar un poquito la nariz para olisquear los aromas que vienen de lejos, y me envuelven. En ese orden vienen las sensaciones siempre; primero me veo a mi misma caminando, después la percepción del vientito , después dejo de verme a mi misma y paso a ser yo  la protagonista, ya no me veo en tercera persona; ahí es cuando me sale sin querer un suspiro que inunda todo el paisaje de un color sepia y se me escapa ese suspiro, sale él, y entra en mi una sensación de paz que me conecta con todo lo que estoy viendo, con todo lo que estoy sintiendo.

El sueño que recuerdo siempre es el mismo sueño. No puedo decir que alguna vez soñé otra cosa, seguramente si, pero no me puedo acordar. Este es el único sueño que puedo contar, si hubo otros, al menos a mi parte consciente no pasaron aún.

Cuando termino de recordar lo que soñé, tomo conciencia de mi cuerpo y lo que siento es que me pasó un tren por encima, que me cagaron a patadas y me duele todo. Siento mucho cansancio y me cuesta levantarme:soy un humano-bólido que renace y pesa mil kilos mas que el día anterior.

Ese paisaje, su contexto y temperatura me resulta un lugar conocido ya de haberlo soñado tantas veces. A veces lo extraño.

No puedo saber con certeza cuanto puede haber de real en el hecho de soñar algo. Pero alguna relación debe existir, si duermo seis horas, y en esas seis horas anduve caminando un montón , tiene sentido que al despertar me sienta cansada. Y empiezo a creer que los viajes astrales son algo real, que de verdad cada vez que puedo me escapo a sueñolandia a dejarme envolver por sus paisajes idílicos y ese viento que me conmueve tanto.

Solo puedo comparar la sensación de libertad inconmensurable que experimento en esos sueños, con la sensación de libertad que sentí todas las veces que viajé a alguna parte. Yo, como humana en estado de vigilia, digamos.


Lo que pienso cuando termino de revivir lo soñado, esos minutos en los que me cuesta reincorporarme a la realidad, es que me duele esta limitación material que conocemos como cuerpo. Y me acurruco para ver si puedo soñar un ratito más, a ver si con esfuerzo puedo volver ahí. Pero por lo general caigo en un estado soñoliento breve hasta que suena el despertador otra vez, y ya no hay tiempo para recordar nada. Si no me levanto y me voy corriendo a la ducha se me va a hacer muy tarde.

Solo puedo hablarles de libertad bajo los términos en que yo la concibo ( en su máxima expresión, la libertad como un acto orgásmico, nada de sensaciones de libertad efímeras; yo vengo de hablar de la libertad enserio, a lo grande) La libertad como un combo, allí donde se experimente libertad , de la mano viene la falta de percepción del tiempo, donde no hay limitaciones y uno esta en comunión con todo y todos . Libertad de poder interactuar con quien sea en el plano que sea. Eso que se entiende como paz, también forma parte del combo. Podría decirse que es casi como un estado meditativo, debe serlo.

Solo en el plano de lo imposible habita la posibilidad de experimentar la libertad en todo su esplendor, y en mi experiencia; eso ocurre solo en el terreno de los sueños. Lo demás son mentiras que nos decimos para no volvernos locos.

Todo lo que nos separa de ese estado de libertad; son trabas. Traba mi cuerpo, traba mi realidad, traba este plano dimensional que nos separa del todo y un larguísimo etcetera.

Ningún humano esta exento de la búsqueda de su propia libertad, y es lo mas sano que, en cuanto humanos, podemos hacer. Cualquier acto creativo impregnado de amor nos arrima bastante a ser libres, pero seguimos adentro de nuestro paquete de humano-bólido hasta el ultimo respiro. Podemos apelar a los atajos que tengamos mas a mano,( ¿soñar? ¿crear algo?) y por suerte cualquier forma de arte y / o ensoñacion nos acerca a eso. Menos mal que venimos al mundo con ese comodín bajo la manga. 

 

 

 

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